La cofradía mantiene la estación de cada Sábado de Pasión con los pacientes, pero comenzará el acto en la plaza por motivos de seguridad
La cofradía del Cautivo presenta una importante novedad de cara a la celebración de su traslado del próximo Sábado de Pasión, 24 de marzo de 2018. La tradicional estación que realiza al Hospital Civil, para llevar el consuelo de las imágenes titulares a los enfermos allí ingresados, se llevará a cabo ante el centro sanitario, dando comienzo fuera, si bien el trono seguirá accediendo al recinto, a la denominada plazuela de la Trinidad, en la fachada principal, para estar lo más cerca posible de la tribuna donde se encuentran los pacientes, que se situará frente a la puerta de Urgencias.
La hermandad lleva estudiando esta opción desde hace meses, fundamentalmente para garantizar la seguridad de quienes asisten a este acto y hacer uso de la mayor permeabilidad que ofrece la plaza del Hospital Civil. Ha redactado un proyecto y lo ha presentado ante los máximos responsables del Hospital Regional de Málaga, hermano mayor honorario de la corporación, para coordinar esta visita, que mantendrá la colaboración prestada como siempre en los últimos años. También con las autoridades municipales de Málaga, que han dado su visto bueno, a la Policía Local y al Cuerpo Nacional de Policía, que dispondrán sus operativos necesarios para el buen desarrollo de esta estación al centro hospitalario.
Sin lugar a dudas, el acto que se celebra en el Civil es uno de los momentos más emotivos de un día cargado de vivencias para todos los devotos de Jesús Cautivo y la Virgen de la Trinidad. Los hombres de trono ceden sus puestos en los varales a los médicos y personal sanitario del centro, que son los encargados de llevar las andas de traslado hasta el lugar donde se emplazan los enfermos. Allí son situadas las imágenes. Ojos anegados en devoción y esperanza en un acto lleno de aplausos, de vítores, de rezos, de poemas y saetas… Los pacientes reciben la bendición y se les impone la medalla de la hermandad en un acto que ha de tener incluso aplicaciones terapéuticas en este universo cofrade en el que ciencia y creencia se dan la mano y son compatibles.
El nuevo acto mantendrá las características del que se venía celebrando hasta ahora. El personal sanitario también ejercerá de portadores del trono durante el tiempo que dure el acto, aunque de este modo tendrá más tiempo y espacio para sentir el peso de Jesús Cautivo y la Virgen de la Trinidad sobre sus hombros.
Los músicos de las dos bandas de la cofradía, la de cornetas y tambores de Jesús Cautivo y la Sinfónica de la Trinidad, también podrán estar presentes en el acto y participarán en el mismo con sus notas musicales.
El espacio estará previamente acotado y el numeroso público que cada año se da cita en la plaza para presenciar la entrada y la salida del trono del recinto del Hospital Civil podrá, igualmente, ser partícipe de todo el acto.
Gracias a estos cambios, la cofradía confía en poder atender con mayor prontitud cualquier tipo de emergencia, evitar la concentración de personas en un recinto con muchas más limitaciones de espacio, multiplicar el número de potenciales espectadores sin necesidad de contar con invitación al efecto y redundar en el objetivo prioritario y fundamental de la estación en el Hospital Civil: la visita a los enfermos, que da sentido a un traslado de estas características.
La cofradía solicita la colaboración de todo el público, y pide igualmente que todos obedezcan las instrucciones e indicaciones de los agentes de las fuerzas de seguridad.
Misa del Alba
Siguiendo con el procedimiento ya iniciado en 2017, la cofradía volverá a poner los medios necesarios para limitar las invitaciones protocolarias a la Misa del Alba para permitir a más fieles que asistan a la eucaristía de campaña. El pasado año, la hermandad redujo a la mitad el protocolo habitual para este acto, eliminando 400 plazas que antes estaban reservadas para el acceso exclusivo por invitación. De este modo, la hermandad liberó una parte importante de la plaza para que fuera ocupada por los fieles y pudieran seguir la Misa del Alba más cerca de las imágenes de Jesús Cautivo y la Virgen de la Trinidad. La estrategia incluyó la instalación de grandes pantallas de televisión para seguir la ceremonia litúrgica. De este modo, además, la corporación se adaptó a los requisitos establecidos en el plan de autoprotección realizado por la propia cofradía y que se ajustan a la ley sobre ocupación de espacios, salidas de emergencia, lugares reservados para discapacitados y aforo por metro cuadrado.
Ofrendas florales
La cofradía insiste un año más en solicitar la colaboración de los devotos que quieran entregarles flores al Cautivo y a la Virgen de la Trinidad durante el traslado, para que atiendan las recomendaciones de los numerosos hermanos responsables que rodean las andas y encargados de depositar estas ofrendas a los pies de las imágenes. Y ruega encarecidamente que no se arrojen ramos de flores desde ventanas o balcones, para evitar daños indeseados que puedan perjudicar a los sagrados titulares que tanto veneran.